Frente al horror de la guerra y la pelea por el poder, Safo nos descubre el estupor del amor, el nuevo canto personal de esta "décima musa" que inspirará al mundo:
"De ella quisiera el andar seductor y el claro brillo de los ojos ver antes que los carros de los lidios y los infantes con sus armas" fr. 16
Mitad del siglo VII a. C, estamos en los tiempos casi míticos en los que se crea la ciudad-estado, triunfan las aristocracias y nace el pensamiento libre; y del canto religioso, ritual, ceremonial, coral y comunitario, emerge la lírica arcaica, mélica, monódica, el canto amoroso de un corazón solitario, acompañado, eso sí, de la lira, la cítara de siete cuerdas o la doble flauta. De la lírica popular, dialógica y mimética, nacerá luego, a fines del VI, el teatro.